Visitamos el restaurant de la bodega ubicada en Mayor Drummond y te contamos qué nos pareció.
Uno de los principales atractivos de visitar Lagarde es almorzar en Fogón, Cocina de Viñedo, el restaurante que funciona sobre los viñedos plantados en 1906 y que ofrece un paisaje indudablemente mendocino.
Los platos que propone el chef se nutren de los frutos de la huerta orgánica, cambian con cada estación y son un mapa de la gastronomía regional y la manera en la que fue influenciada por las diferentes corrientes inmigratorias que se asentaron en la provincia desde mediados del siglo XIX.
La bodega se fundó en 1897, en Luján de Cuyo, y hasta el día de hoy, conserva su casona original, la cual refleja lo que transmiten sus vinos: un balance armónico entre el pasado y el futuro. Siguiendo esa línea, en Fogón se respira al máximo el estilo de vida mendocino y desde hace varios años está posicionado entre los mejores restaurantes de Mendoza según TripAdvisor.
El restaurante “el fogón” de bodega está a cargo del chef Lucas Olcese.
En nuestra visita tuvimos la posibilidad de probar el menú de 4 pasos:
Entrada: Tomates + helado + duraznos + albahaca
Maridado con Proyecto Hermanas Chardonnay 2020.
Para comenzar nos pareció un plato excelente, una mezcla perfecta de sabores y texturas. Nos gustó mucho la combinación del calor de la tostada de focaccia con queso fundido con la frescura el helado de tomate.
Principal: Ternera + pimiento + remolacha + huerta
Maridado con Primeras Viñas Cabernet Sauvignon 2014.
El clásico que nunca falla, ojo de bife con verduras. Cocción perfecta al punto solicitado, carne de la mejor calidad. Muy buena combinación con las verduras de la huerta y el excelente vino elegido para maridarlo.
Postre: Durazno + crocante + helado + mousse
Maridado con Espumante Lagarde Extra Brut Método Tradicional
De nuevo queremos destacar una muy buena combinación de sabores y texturas. Un postre muy redondo por donde se lo mire, mendocino por excelencia.
4to paso: Café artesanal brasileño – Petit fours
No siempre el café es contado como un paso en el menú, acá sí, y bien hecho. Un gran café, que pocas veces tomamos, sin duda una buena elección para el menú.
Conclusiones
Fue una gran noche, repleta de sabores y buenas experiencias. La comida muy buena, y sobre todo bien acompañada.
Un lugar tranquilo, bien logrado, que transmite mucha tranquilidad. Algo que tenemos que recalcar y agradecer, es la majestuosa atención por parte de todo el staff de Lagarde, llegaban en el momento indicado, nos trataron siempre con mucho respecto y buena onda, una atención que sin lugar a dudas es de lo mejor que podemos encontrar en Mendoza. Nos hicieron sentir como en casa.