El Instituto de Desarrollo Rural (IDR) entregó certificados a 17 firmas mendocinas cuyos productos cumplen con las características necesarias para acceder al reconocimiento. La entrega se realizó en las instalaciones de la Olivícola Laur en Maipú y cparticiparon referentes de los sectores público y privado.
El Ministerio de Economía y Energía, a través del Instituto de Desarrollo Rural (IDR), entregó 17 nuevos certificados de Indicación Geográfica (IG) a empresas mendocinas por sus aceites de oliva virgen extra (AOVE).
La entrega, que se realizó en las instalaciones de la Olivícola Laur, prestigiosa firma ubicada en Maipú, contó con la participación de referentes de los sectores público y el privado, quienes destacaron el trabajo que se viene realizando, al cumplirse un año de haber obtenido el tan ansiado reconocimiento para la provincia.
“El año pasado fueron siete empresas las que certificaron IG Mendoza, este año son 17. En total, son 25 las marcas comerciales que se van a ver en los puestos de venta con el sello IG Mendoza, se duplica así la cantidad de etiquetas. El año pasado fueron 250.000 y este año va a haber 500.000 envases con etiquetas IG Mendoza”
remarcó Alfredo Baroni, director técnico del IDR.
“Esto muestra la confianza en el sistema, en el sello de calidad, en la campaña de promoción que se está llevando a cabo y, sobre todo, es un poco de esperanza para un sector que durante mucho tiempo estuvo abrumado por muchos problemas y que ahora ve la posibilidad de sumar una herramienta tendiente a la solución”
agregó el funcionario.
Consultado Baroni sobre cómo es el impacto que ha tenido el sector a raíz de lo que se viene realizando en pos de alcanzar los objetivos planteados, remarcó:
“Hay que ser muy sensatos y medidos a la hora de ver impactos. La verdad es que el aceite de oliva requiere de 10 años para que una política impacte a nivel de volumen. Un olivo tarda 4 o 5 años en empezar a producir. Previo a eso, hay que producir la planta y elaborar los proyectos y no son políticas que se puedan hacer a corto plazo, se piensan a 10 años y ojalá en ese período de tiempo empecemos a ver incrementos en la producción”.
“Mendoza está acotada desde el punto de vista hídrico y no es posible, por el momento, pensar en impulsar grandes emprendimientos pero sí recuperar lo que se tiene y en ese camino estamos”
añadió Baroni, quien vio como una buena señal que crezca la cantidad de empresas que certifican.
“Sin duda, el principal ganador en este proceso es el consumidor, que recibe una garantía de calidad, recibe un producto diferenciado y desde ese punto de vista es quien más puede ganar. En Argentina, más allá de la industria vitivinícola, no estamos tan acostumbrados a los sellos de calidad, de IG, pero en la Unión Europea y el Hemisferio Norte está más desarrollado el concepto y no es menor. También en ese sentido, hace poco menos de un mes participamos en un concurso en Turquía y el sello de calidad de Mendoza, a través de las tres industrias con las que participó la provincia, recibió tres distinciones”
cerró.
En tanto, Valentina Navarro Canafoglia, directora de Agricultura de la provincia, sostuvo:
“El poder avanzar en nuevas certificaciones representa la confianza que el sector está poniendo en las acciones que venimos impulsando de manera conjunta con todos los referentes vinculados a la olivicultura de la provincia. Estos nuevos certificados permitirán llegar con nuestros productos a nuevos mercados, posicionando con más fuerza la marca Mendoza”.
Mario Bustos Carra, gerente general de la Asociación Olivícola de Mendoza, comentó que la entidad que agrupa a los referentes del sector es la que inició los trámites necesarios para acceder a la obtención de la Indicación Geográfica para los aceites de oliva virgen extra de la provincia.
“No hubiera sido posible si no hubiésemos contado con el apoyo de todas las instituciones que se han visto involucradas en todo esto,tanto del sector privado, de la Provincia y de la Nación. Esta certificación no dice que nuestros aceites son mejores o peores que otros, sino que, por su conformación, son únicos y es por ello que hace que sean muy valorados”
remarcó el titular de la entidad.
En este sentido, Carra remarcó que todo lo que tenga que ver con certificación de productos siempre es muy bien recibido por el consumidor:
“Es una norma que se acepta de muy buena manera y conseguir que 17 empresas más obtengan este reconocimiento, es realmente un logro muy importante”,
aseveró.
Al cierre, el gerente general de Asolmen añadió:
“En las circunstancias en las que se encuentra nuestro país, es de destacar que aún hay muchos que siguen apostando y confiando en la Argentina, piensan aún en mejorar nuestro querido país y este es un mensaje que deben tomar desde el sector político para tratar de ayudarnos a que todo esto que se está haciendo siga el curso que se pretende como alguna vez se pensó con la vitivinicultura”.
A su turno, Gabriel Guardia, gerente de la Olivícola Laur, destacó que:
“Mendoza sigue siendo la gran marca, más allá de la IG. Es más fácil vender en Argentina y en el mundo un aceite de oliva mendocino que de cualquier otra provincia”.
Haciendo hincapié sobre este último punto, Guardia remarcó que Mendoza viene perdiendo olivares desde hace mucho tiempo:
“San Juan tiene la producción más grande de la Argentina, después está La Rioja, Neuquén e incluso toda la gente que está plantando alrededor de la costa, es decir que hay un montón de gente en distintos lugares de la Argentina haciendo plantaciones eficientes, intensivas, con riego por goteo y Mendoza todavía tiene acción de marca, pero nos hemos ido quedando sin olivos”.
Gustavo Ilardo y Carina Muravnik, ambos socios gerentes de la firma Pasrai SRL, fueron parte del encuentro, ya que obtuvieron la correspondiente certificación para sus aceites de oliva virgen extra. En el marco de la actividad, Ilardo señaló:
“Es un sello, una marca paraguas para todas las fábricas que están trabajando muy bien en Mendoza. Este sello no habla de calidad, porque ya se da por hecho que son excelentes productos, sino que nos identifica como zona productiva”.
“Esto nos une a Mendoza y a juntar fuerzas en Mendoza y el país. Es realmente impresionante cómo se está trabajando el desarrollo y posicionamiento de la marca a nivel nacional e internacional”, remarcó por su parte Muravnik, y agregó: “Este sello garantiza una calidad que nosotros tenemos en todos nuestros productos pero en este caso específico lo compartimos con el resto de Mendoza”.
Consultada Muravnik sobre qué representa Pasrai para la provincia, comentó:
“Es algo que empezó con mis bisabuelos. Es emoción, es familia, es compromiso y mucho trabajo. Son muchos años trabajando con el turismo. Las familias Muravnik e Ilardo han venido trabajando muy fuerte para que Pasrai permanezca, crezca y representen el aceite de oliva.»
Al cierre, Esther Sanchez, rectora de la UNCuyo, agregó:
“Esta es una muestra más de lo que se puede lograr trabajando en conjunto y los aportes que se hacen desde la universidad a la sociedad. Este es un camino iniciado y lo que me gustaría destacar es la colaboración entre el sector público, de hecho, el IDR como organismo mixto, la participación del sector privado, que puede poner en valor lo que se hace en Mendoza con esta Indicación Geográfica”.
Para Sánchez, avanzar con nuevas certificaciones posiciona a la provincia en un mundo en el que realmente se está trabajando por poner en valor productos de calidad:
“Esto, sin lugar a dudas, también abre una puerta importante para las exportaciones de Mendoza y significa una mejora en matriz productiva. Es el tipo de aportes que se necesitan para llevar a Mendoza al mundo”
remarcó.
“Entre las empresas que participaron hay muchos graduados nuestros y es muy emotivo encontrarse con quienes han sido formados en la universidad y que están transfiriendo sus conocimientos, todo el bagaje que han adquirido, tanto en el grado como en el posgrado. Ese es el objetivo esencial de la universidad: formar profesionales, técnicos, artistas, que contribuyan a una mejor sociedad y que se quedan en Mendoza y que aportan, para que sea una Mendoza mejor en el sector productivo. Fue muy emotivo entregar estas certificaciones y ver cómo gente nuestra está poniendo en práctica todo lo que han aprendido en la universidad”
cerró.
Empresas que certificaron
1 – Millán SA, Olivícola LAUR, de Maipú.
2- Straven SA, Finca San Gerardo.
3 – Olivares Don Ignacio, de Rivadavia.
4 – Institución Salesiana San Francisco Solano, Almazara Don Bosco de Rodeo del Medio, Maipú.
5 – Old Tree SAS, de Cruz de Piedra, Maipú.
6 – Almazara, Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo.
7 – Olivícola Moluá, de Lunlunta, Maipú.
8 – Almaoliva SA, de Coquimbito, Maipú.
9 – Olivares Centenarios SA, ubicada en Rodeo del Medio, Maipú.
10 – La Agrícola SA, de Fray Luis Beltrán, Maipú.
11 – Allexport, ubicada en Lavalle.
12 – Oilco SA, de San Martín.
13 – Jeheza SA, ubicada en Junín.
14 – La Portada SA, ubicada en Fray Luis Beltrán, Maipú.
15 – Jose Nucete e Hijos SA, ubicada en Fray Luis Beltrán, Maipú
16 – Pasrai SRL, ubicada en Maipú.
17 – Fincas Patagónicas, ubicada en Maipú.
Autoridades presentes
Entre los presentes estuvieron el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié, Esther Sánchez, rectora de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo); Armando Manzur, presidente de Asolmen (Asociación Olivícola de Mendoza); Valentina Navarro Canafoglia, directora de Agricultura del Ministerio de Economía de Mendoza; María Flavia Filipini, decana de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo; Juan Carlos Najul, director del INTI Regional Cuyo, y Analía Díaz Bruno, directora INTA EEA, Luján de Cuyo, entre otros.