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Elegancia Creativa: Finca Agostino

Visitamos el restaurant de la elegante bodega Finca Agostino, ubicado en Barrancas, y te contamos nuestra experiencia.

Agostino Wines es el logro supremo de la familia Agostino, fruto de la dedicación de toda su vida al espíritu empresarial ambicioso. Como familia y empresa, creen que, con pasión y compromiso, no hay límites para lo que se puede producir.

Todo comenzó en 2003, luego de 30 años de establecer una exitosa empresa inmobiliaria en Canadá, la familia decidió plantar nuevas raíces en nuestra provincia de Mendoza.

Habiendo crecido en la región, los hermanos reconocieron el potencial inherente de la tierra. Luego de una larga búsqueda, adquirieron viñedos en la región Maipú a 35 minutos de la Ciudad de Mendoza.

Con nuestro equipo tuvimos el placer de ir a sus instalaciones para hacer un recorrido por la bodega y posteriormente disfrutar un almuerzo especial por los chefs Pablo y Carlos «Charly» Torres, tuvimos la oportunidad probar bastantes platos de la carta así como también algunos propios del día.

Primer paso: Gazpacho de tomate + Aceite de apio + Emulsión de tabasco

Un gazpacho pensado para tomar como si fuera un «Bloody Mary». Desde lo conceptual nos pareció una muy buena idea para arrancar esta experiencia. Y nuestro paladar nos confirma esta sensación. Ácido, picante, salado; todos los sabores concentrados en esta sopa que nos hizo ilusionarnos mucho con lo que sigue.

Segundo paso: Melón + Jamón crudo

Maridado con Agostino Finca – Chardonnay / Viognier – 2019

Este es un plato cuanto menos tradicional. Sin embargo, nos pareció un bocadito lleno de texturas y sabores. Además, marida muy bien con el vino. Nos gustó.

Tercer paso: Galleta de algarroba + Humita

Maridado con Agostino Familia Gran Reserva – Semillón / Sauvignon Blanc – 2018

Acá es cuando empezamos a ver las manos del chef. La conjunción entre el crocante de la galleta y la cremosidad de la humita, hacen que las sensaciones táctiles de este plato sean magnificas, lo cual sumado a la maravillosa combinación de sabores lo convierte en un plato muy destacable. Podemos decir también que los verdes acompañan muy bien.

Cuarto paso: Guacamole de zapallitos + Rolls de chivo en escabeche + Tomates cherrys asados

Maridado con Agostino Finca – Syrah / Malbec – 2018

Este plato simplemente nos voló la cabeza. Un guacamole de zucchinis que no tiene nada que envidiarle a uno de palta, es más, tiene cosas propias que realmente suman; perfectamente aliñado, con la acidez justa. El chivo y los tomates hacen una perfectamente perfecta compañía con el resto de los ingredientes. Nos encantó por todos lados.

Quinto paso

Ladrillo de ternera + bastones de papa + ensalada de estación + chimi de cerezas
Kebab de cerdo + arroz chato
Ñoquis de batatas sellados + vegetales
Canelones gratinados de vegetales asados + bechamel

Maridado con Agostino Familia Gran Reserva – Blend Tinto

Acá nos sacamos el sombrero con todos los platos. A menos que haya una preferencia clara por algún plato, va a ser una elección muy difícil. Así fue para nosotros, por ende tuvimos que probar todos. Nos sorprendieron, puesto que no son platos que uno ve a la hora de ir a una bodega. Sin embargo, fue una sorpresa para bien.
Todos en general tienen una nota muy alta, sabores variados y un maridaje excelente con el vino servido. De todas maneras, los que nuestros favoritos fueron los kebabs y el ladrillo de ternera. Por lo tanto, si tenés ganas de probar algo nuevo, te recomendamos los kebabs.

Sexto paso: Alfajores de avena, azúcar mascabo y burro + crema pastelera de durazno blanco + peras + menta

Maridado con Agostino Espumante Extra Brut – Pinot Noir / Chardonnay / Chenin

Los alfajores nos gustaron, notamos una marcada presencia del sabor burro. Que, a su vez, hace una muy buena pareja con las peras. El espumante juega un papel especial, hace un gran maridaje con el resto del plato.

Conclusiones

Finca Agostino nos brindó una experiencia muy nutrida tanto en lo gastronómico como en lo enológico. Una muy amplia variedad de sabores y estilos de cocina en los platos hacen que uno se vaya del lugar sintiéndose satisfecho.

La calidad de la comida se fusiona con unas instalaciones que verdaderamente son de lujo, la amabilidad del equipo y el paisajismo del lugar; tornan a Agostino en un lugar recomendado.

Si tenemos que recalcar algo que nos llamó la atención, fue la visita por la bodega. Podemos decir con seguridad que en ningún otro lugar vivimos algo parecido.
De parte de The Malbec Post le agradecemos a todo el staff por lo vivido.