Eran los años 20 y en Estados Unidos una “revolución” encabezada por mujeres jóvenes, impetuosas y atrevidas, conscientes de la ausencia de varones como consecuencia de la guerra ( 1.914-1.918 ), olvidaron sus roles de esposas y madres para salir al mundo a trabajar . En éste contexto la irrupción de la mujer cambió la sociedad occidental. El reclamo de ayuda durante el conflicto bélico y la necesidad de mano de obra, exigió la incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral. Obviamente, esto también significó la independencia económica de ellas y su liberación del mundo patriarcal y machista imperante en la época. Lo cierto es que ésta generación de chicas audaces, cambió el mundo casi de la misma forma en que cambió su indumentaria . Todo se volvió más suelto, más liviano, más cómodo. Nada de cabellos largos; el pelo cortadito a lo varón o corte bob , ropas sueltas y cómodas para trabajar, caminar y andar en bicicleta o conducir vehículos. Polleras muy cortas, brazos desnudos, abandono para siempre del corsé y nada de cinturita o busto exuberante. Los vestidos caían sobre las caderas y algunas hasta se aplanaron los senos para parecer más jóvenes. En éstos locos años 20, las mujeres pertenecientes a clases adineradas, eran conocidas como las “ flappers” ( palabra inglesa que se usó a partir de ésta década para diferenciar a las mujeres que adoptaron un estilo de vida liberal ). Aunque hay quienes las consideran dueñas de la época del surgimiento de la mujer moderna, la realidad nos muestra dos niveles bien diferenciados : el de las que trabajaban en condiciones deplorables por un mísero salario y el de las que vivían en la opulencia escandalosa de la burguesía norteamericana anterior a la Depresión del 30.
Las flappers pertenecientes a ésta clase privilegiada tenían otro aspecto no menos interesante para observar : cierto glamour que se expresaba en el uso de brillos y lentejuelas, plumas, flecos, collares de perlas muy largos, y mucho maquillaje. Look que iba de la mano de ciertas conductas llamativas e impetuosas. Las flappers eran chicas divertidas; iban de fiesta en fiesta, bebían mucho alcohol, fumaban en elegantes boquillas, lucían bocas muy pintadas, bailaban fox trot, exhibían sus piernas largas y sus falda cortas, escuchaban jazz y regresaban de madrugada conduciendo autos lujosos a gran velocidad. Un estilo de vida provocativo y desenfrenado que fue magistralmente recreado por el escritor Francis Scott Fitzgerald en su maravillosa novela, “ El Gran Gatsby”. ( Obra llevada al cine en varias oportunidades ).
Estas flappers eran díscolas, transgresoras, frívolas, insensibles y poco inteligentes. En realidad, Scott Fitzgerald nos muestra una gama de personajes inconscientes que se mueven en un mundo vacío y artificial donde lo importante es acumular riqueza para ocupar un lugar destacado en la sociedad. Sobre Daisy y Tom (personajes de “El Gran Gatsby ”) , el autor hace ésta descripción : “ …Tom y Daisy eran personas sumamente descuidadas…dañaban las cosas y a las personas y, entonces se amparaban en su dinero o en su enorme apatía, o en lo que fuera que los mantenía uno al lado del otro, y dejaban que los demás limpiaran los regueros que habían dejado…”
Los dorados años 20, no fueron brillantes para todas como parecían, excepto por el épico abandono del corsé.
Hasta los próximos relatos…
condensados.